Reseña

La memoria regional ancestral también habla pero, nadie la ha escuchado, dice La Mama Trocha, la nueva crónica, que raya en novela, de Pedro Fidel Ocaziónez Rugeles, quien se sumergió en los últimos cuatro años en diversas alternativas documentales, así como fuentes humanas, para comprender el saber y la experiencia de las culturas Yareguíe, Guane y Chitarera.
De vuelta de ese viaje al pesado, el autor nos revela la capacidad de entendimiento de estas culturas con la naturaleza para desplazarse por vías terrestres y fluviales, sin alterar el hábitat, como quiera que se reconocieran ser parte de ella.
Uno de los aportes más importantes de la obra es que mirando al pasado pone de presente la vigencia de dos de los proyectos más sentidos en los últimos cuarenta años para la integración por vía terrestre entre Colombia y Venezuela: la conexión del Magdalena medio santandereano al área metropolitana de Bucaramanga, y la vía desde esta capital a Cúcuta por el Boquerón del Alto del Escorial.
La obra de Ocaziónez Rugeles coincide con las propuestas de algunos planificadores modernos, tanto de instituciones públicas, académicas y privadas, de la misma región, en torno a la funcionalidad de ese camino, utilizado hace más de 500 años por los aborígenes.