Reseña

El cine se ha convertido en un lugar obligado de paso para todas las formas culturales. Sin embargo hay dos de ellas, que quizá han hecho el cine, y a la vez han circulado en sus imágenes: el mito y el arquetipo. El estudio de ambas figuras remite al difícil problema del origen, y cómo pese a la lógica del progreso en línea recta, este regresa en una singular espiral. Este libro analiza cómo ambas figuras emergen al interior de los relatos cinematográficos para darles forma, lo que a la vez permite la comunión inconsciente de los públicos con lo atávico. Dos directores, Roman Polanski y Francois Truffaut, harán las veces de demiurgos al interior de este trabajo para ilustrar la forma en que el profuso pasado, los suelos mitológicas, las formas arquetípicas, emergen en las lánguidas imágenes de una sala oscura.