Reseña

La crisis climática es mucho más que un problema ambiental: es una crisis de justicia y de modelo civilizatorio. Sus raíces se encuentran en un desarrollo extractivista, patriarcal y colonial que ha generado despojo, violencias múltiples y desigualdades históricas. Sus impactos recaen con mayor fuerza sobre mujeres y comunidades discriminadas, que cargan con los efectos combinados de la pobreza, el racismo, la exclusión política y la violencia estructural.
Este documento es presentado por Sisma Mujer, una organización feminista con 27 años de trayectoria en la defensa de los derechos humanos de las mujeres, en un momento crucial para Colombia. La coyuntura de la construcción de paz, las próximas elecciones y los retos que enfrentan las lideresas y defensoras en todo el país hacen urgente proponer un horizonte de justicia feminista climática. Nuestra experiencia acumulada nos permite hablar desde nuestros modelos de acompañamiento integral, plantear los desafíos que hoy viven las lideresas en los territorios y subrayar el papel fundamental de la justicia feminista para garantizar transformaciones reales.
Frente a la crisis climática, los enfoques dominantes han sido insuficientes: han reducido a las mujeres a víctimas o “salvadoras naturales”, invisibilizando su agencia, y han tratado el género como un agregado menor en las políticas de adaptación. Desde el feminismo, proponemos otra lectura: el cambio climático es profundamente político y cotidiano, atraviesa los cuerpos, los territorios y las relaciones de poder. Y por eso, no basta con soluciones tecnocráticas o de mercado: necesitamos un cambio de paradigma centrado en la justicia climática feminista.