Reseña

Estados del alma, son muchos. Momentos que llegan a nuestra vida, la llenan de color, alegría, tristeza y angustia. Estados del alma, son esos susurros que brotan desde adentro, una nueva ilusión, un día gris, una herida que es necesario sanar, un momento de locura o un instante de cordura.

Es el blanco, es el negro, es el frío, es el calor, es una hoguera, un buen vino, una poesía, una bella flor, una noche de luna llena. Es una invitación a bucear dentro de nosotros, para escuchar lo que el alma nos dice, en esos momentos que necesita de nuestra compañía.

Es Felicidad, es tristeza, es vacío, es soledad, es angustia, miedo, euforia, serenidad, enamoramiento, cansancio, dolor, desengaño, éxtasis, rabia, decepción. Todos, son estados del alma, que brotan desde muy dentro de nosotros.

Es nuestra alma que nos conversa al oído, sólo que, hay que saber agudizar los sentidos para poderla oír, entenderla, comprenderla y sacarla a pasear de vez en cuando.